Análisis sobre la situación de la violencia y seguridad ciudadana en los jóvenes 2020

4 de Mayo de 2021

Realizado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), a través del Proyecto Regional Infosegura y con el apoyo de la Secretaría de Seguridad y el Ministerio Público.

Desde el Programa de las Naciones Unidad para el Desarrollo (PNUD) y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), a través del Proyecto Regional Infosegura y con el apoyo de la Subsecretaría de Seguridad en Asuntos Interinstitucionales de la Secretaría de Seguridad y el Ministerio Público, se presenta el “Análisis sobre la situación de la violencia y seguridad ciudadana en los jóvenes 2020”.   

De acuerdo con el análisis, en el año 2020, Honduras presentó una disminución generalizada en todos los hechos y denuncias registrados para el grupo etario entre los 15 y 29 años de edad. Las disminuciones se identifican principalmente durante la época de la cuarentena derivada de la crisis por COVID-19, es decir, a partir de marzo de 2020.

En 2020 el número de víctimas de homicidios se redujo 17.9% (313 víctimas menos) respecto a 2019. La tasa de homicidios fue de 53.7 homicidios por cada 100 mil habitantes, la más baja de la última década (presenta una disminución de más de la mitad respecto a la tasa de 2013).

Las denuncias de jóvenes por violencia intrafamiliar disminuyeron durante el periodo de confinamiento. Sin embargo, estas aumentaron a partir de septiembre, sobrepasando los datos de 2019 en los últimos cuatro meses del año. En octubre de 2020, las denuncias aumentaron en 207% con respecto al mismo mes de 2019.

Para dar sostenibilidad a los avances y dar respuesta a los desafíos, se necesita tomar acciones en materia de políticas públicas dirigidas a fomentar el desarrollo de entornos resilientes para las personas jóvenes. Estas acciones requieren ser formuladas con base en la consideración de diversos enfoques, para volverse pertinentes e integrales.  

La estrategia regional del PNUD indica que el manejo de la información es clave para las políticas públicas. Para que la ciudadanía se involucre, es necesario compartir los datos, y los datos deben ser compartidos con la ciudadanía para fortalecer la confianza.

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