La denuncia, las artes y los negocios para prevenir la violencia

22 de Julio de 2019

Choloma es la tercera ciudad más grande de Honduras

Crear entornos seguros para la mujer y jóvenes es esencial para construir ciudades pacíficas y inclusivas, que crean oportunidades para sus habitantes. 

Plaza "General Francisco Morazán" en la ciudad de Choloma

Por eso, en Choloma — el tercer municipio más violento de Honduras, según el Boletín Oficial de Homicidios, Suicidios y Muertes por Lesiones de Tránsito en Honduras (2017)- se ha trabajado para fortalecer al gobierno local en prevención de la violencia, con prioridad en definición de líneas estratégicas, prevención de la violencia contra la mujer y creación de oportunidades para jóvenes en situación de riesgo. 

Planificación y gestión local: la seguridad y bienestar del ser humano en el centro

 

Tener una visión de lo que se desea como ciudad es el enfoque que se ha usado en Choloma. Un resultado es que los y las técnicos municipales cuentan con las herramientas de planificación y gestión que se plasma en un Plan Local de Convivencia y Seguridad Ciudadana. 

El trabajo se ha orientado en crear las condiciones en las y los técnicos locales para que, cada 4 años, puedan definir las líneas de trabajo en base a las prioridades locales y de la participación ciudadana. Las habilidades adquiridas han girado en torno a desarrollar y profundizar redes existentes, intercambios para el aprendizaje de otros contextos y de buenas prácticas, y aplicar la planificación.

Cristhy Orellana, Técnico en Convivencia y Seguridad Ciudadana de Choloma durante implementación de Plan Local

Desarrollar un Plan Local nos permitió caracterizar las distintas problemáticas, identificar sus causas y priorizar las posibles soluciones bajo un enfoque de prevención social y situacional”, dice Cristhy Orellana, Técnico en Convivencia y Seguridad Ciudadana de Choloma al momento de implementar el Plan Local.

Ni una más

 

Honduras es de los países más afectados por la violencia contra la mujer en Latinoamérica. Según el Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe, en 2014, Honduras tuvo la tasa más alta de feminicidios en la región: 531. 

Una mecamismo para garantizar y proteger los derechos de las mujeres a nivel local son las Oficinas Municipales de la Mujer (OMM). En el país existen más de 140 OMM donde las muejres pueden acudir para recibir apoyo legal y psico-emocional antes, durante y después de salir del ciclo de violencia.

Cuando las mujeres concen plenamente sus derechos, pueden desarrollar al máximo en lo profesional y lo personal

La OMM de Choloma apunta hacia una mejor atención, orientada al cuidado y protección de las víctimas a través de capacitaciones, talleres de formación y el desarrollo de habilidades usando el recurso más valioso, el personal, de esta oficina, como nos cuenta la Coordinadora de la Oficina, Belinda Domínguez.

Belinda Domínguez,Coordinadora de la Oficina Municipal de la Mujer en Choloma

Belinda Domínguez es la Coordinadora de la OMM en Choloma. Ella y su equipo, todos los días, están listos para ayudar a mujeres víctimas de violencia brindado apoyo emocional y enseñándoles a defender sus derechos. Belinda reconoce como un logro que, con el tiempo, las mujeres del municipio han adoptado una cultura de denuncia contra la violencia.

Belinda leyendo el “Manual de funcionamiento de la Oficina Municipal de la Mujer con énfasis en el abordaje de la violencia contra la mujer”

“Seguimos manteniendo estas buenas prácticas. PNUD nos dejó capacidades instaladas y recibimos apoyo técnico y fortalecimiento institucional para poder realizar mejor nuestro trabajo.”

El trabajo de la OMM de Choloma ha llegado más allá de dar acompañamiento legal a mujeres víctimas de violencia, ha cambiado positivamente la vida de estas mujeres y de sus familias. Muchas han continuado con carreras universitarias, emprendiendo negocios o siguiendo los que ya habían empezado.

Mujeres de Choloma

“Ellas mismas nos están manifestando que a través del PNUD recibieron capital semilla para desarrollar emprendimientos. Se están empoderando y son capaces de hacer todo lo que ellas se proponen”, dice Belinda contando la historia de dos señoras, una que empezó vendiendo donas y ahora tiene 11 empleados; y otra que hace cortinas y ahora tiene 3 máquinas que hacen su trabajo más eficiente.

La OMM de Choloma está uniendo esfuerzos con otras organizaciones locales y juntos coordinan actividades para la comunidad, así como campañas educativas, preventivas y de sensibilización. Hasta la fecha, ésta OMM ha atendido los casos de más de 15,000 mujeres. Actualmente, están trabajando con los hombres el cambio de actitudes, donde aprenden nuevas masculinidades libres de violencia. La propuesta de trabajo es fortalecer las capacidades de respuesta y atención a nivel institucional y brindado el soporte a nivel individual. 

“Nuestra meta es llegar a cada hogar para empoderarlas y también trabajar con hombres para poder tener esa equidad y lograr que nuestro municipio baje los índices de violencia contra la mujer.” — Belinda Domínguez.

Empoderamiento económico para mujeres y jóvenes

Sonia Fuentes, mujer emprendedora de Choloma en su negocio

El empoderamiento económico, además de reducir la pobreza, genera efectos positivos a nivel comunitario, mejorando la calidad de vida de los emprendedores y de sus familias, y generando empleo para más personas a nivel local.

Nelson Mendoza, Gerente Administrativo de la Cámara de Comercio e Industria de Choloma (CCICH)

Algunas de las mujeres emprendedoras de las que cuenta Belinda han recibido el asesoramiento técnico de la Cámara de Comercio e Industria de Choloma y apoyo económico de un fondo de emprendimiento facilitado por PNUD. Ellas, junto con un grupo de jóvenes en riesgo social, han aprendido sobre el manejo de finanzas, atención al cliente e inteligencia emocional, y capacidades que les serán útiles a lo largo de su vida personal y profesional.

“A través de estos fondos que se hicieron entregables a CCICH, logramos contactar una masa crítica de jóvenes en riesgo social,” explica Nelson Mendoza, Gerente Administrativo de la Cámara de Comercio e Industria de Choloma (CCICH).

Por su rol dentro de la CCICH, Nelson tiene contacto directo con las mujeres y jóvenes apoyados por el fondo de emprendimiento, por lo que pudo recordar fácilmente los casos de éxito más notables ― jóvenes como Suelen Castillo y Manuel Paz.

Los Planes Locales de Convivencia y Seguridad Ciudadana fueron creados para cumplir el ODS 16

Tenemos un techo fijo con mi familia. Tengo a mi niña en la escuela y otro en camino. La vida me ha cambiado.”, dice con mucha satisfacción Suelen, dueña de una pulpería que ha tenido mucho éxito en su barrio. Ella fue víctima de violencia cuando la asaltaron saliendo del banco, un incidente que la afecto emocional y económicamente. 

Suele Catillo atendiendo su negocio

Suelen se apoyó en la CCICH y el fondo de emprendimiento del PNUD, y, así, continuó su negocio.

De todas las pulperías en la comunidad la mía es la más fuerte, es la más surtida, allí va a hallar de todo.”-Suelen Castillo, dueña de una pulpería en Choloma, Cortés

Pulpería de Suelen Castillo

A pocas cuadras del negocio de Suelen, se encuentra el de Manuel Paz, un taller de carros en mal estado que le dejó su antiguo jefe. 

Taller de Manuel Paz

Manuel Paz, dueño de un taller de pintura y enderezado en Choloma.

A través del fondo de emprendimiento, ha podido restaurarlo. poco a poco, para poder recibir más y mejor a sus clientes, cuenta él. El taller de Manuel es su sustento y el de su mamá.

Ya tengo bastante clientela. Somos cinco los que trabajamos y ahí vamos para adelante.”-Manuel, dueño de un taller de pintura y enderezado en Choloma.

Taller de pintura y enderezado de Mnauel Paz

Otras historias de éxito y superación son las de Sonia y María, mujeres emprendedoras y ahora, independientes.

Sonia Fuentes, sobreviviente de violencia doméstica y dueña de su propia negocio

Sonia Fuentes tiene nueve años de haber empezado su puesto de pulpería. Cinco años después de empezar su negocio, sufrió un fuerte episodio de violencia doméstica que afectó mucho su economía, pues incurrió en gastos médicos que absorbieron el presupuesto de su negocio. El puesto ya no estaba tan abastecido como al principio. 

Sonia atendiendo a una clienta

Luego de recibir el apoyo del fondo de emprendimiento, el negocio de Sonia ha crecido mucho, tanto así, que en su pulpería puedes encontrar desde chocolates hasta cepillos de diente. Aunque el emprendimiento de Sonia va muy bien, ella no quiere detenerse, sino desarrollar todo su potencial, diversificar los productos que ofrece y convertirse en vendedora mayorista.

Yo tengo toda la fe en Dios que me van a seguir brindando ayuda (PNUD) para poder seguir trabajando. Tengo tres hijos que dependen de mí.”-Sonia Fuentes

Maria Guzmán es dueña de una chiclera y viuda con tres hijas. Igual que Sonia, María continúa buscando la manera de crecer con su negocio, por eso, además de vender caramelos y chicles, también ofrece desayunos. Ella cuenta que aún le hacen faltan mesas y otra nevera para poder trabajar cómodamente.

María Guzmán, dueña de una chiclera

Este es el ”troco” en el que María moviliza los productos de su chiclera

Todas las mañanas, María lleva la mercancía de su negocio en una bicicleta sin pedales.

En eso yo me traslado. No lo manejo porque no puedo andar en bicicleta. Lo llevo empujado y camino como 30 cuadras hasta llegar a mi casa.”-María Guzmán

A pesar de las complicaciones, María reconoce el crecimiento que su puesto ha tenido desde que recibió al apoyo del fondo de emprendimiento, gestionado a través de la CCICH.

María recibiendo cliente en su negocio

Los jóvenes y las mujeres emprendedoras ahora solo aspiran a un futuro igual de transformador. En ese sentido, Nelson Mendoza asegura que actualmente, se les está dando seguimiento para garantizar el eje principal, la autosostenibilidad.

Ahora mismo ellos están muy agradecidos,” dice Nelson Mendoza, Gerente Administrativo de la Cámara de Comercio e Industria de Choloma (CCICH).

El arte abre oportunidades  

El Plan Local de Convivencia y Seguridad Ciudadana no solo se orientó al empoderamiento de la mujer y apoyo de emprendimientos, también contempla a las artes como un método para prevenir la violencia, evitando que jóvenes vulnerables se involucren en situaciones violentas.

Carlos Pineda, Director Ejecutivo del Programa Municipal COMVIDA en Choloma

“El arte transforma vidas cuando va acompañado de una formación de habilidades, a la par de ciertos valores que invitan a la convivencia y a la cultura de paz en la comunidad,” fueron las palabras de Carlos Pineda, Director Ejecutivo del Programa Municipal COMVIDA en Choloma.

COMVIDA es un programa que busca promover el desarrollo integral de la infancia, adolescencia y juventud. Su propósito es formar jóvenes con habilidades y capacidades que los mantengan al margen de la violencia. Un ejemplo claro es el de los Voceros Comunitarios, jóvenes que han aprendido a usar cámaras fotográficas y de video, programa de computadora para edición y equipo para transmisión radial a través de capacitaciones y talleres sobre comunicaciones. Los Voceros Comunitarios producen su propio contenido, basado en valores positivos, para orientar y alcanzar a las personas jóvenes del municipio de Choloma.

Miembros que componen la batucada de BATZAMU

COMVIDA también quiere despertar el interés de los jóvenes por las artes, por lo que nace BATZAMU, el acrónimo de Batucada, Zancos y Muralismo, un grupo de jóvenes dentro de COMVIDA que promueve la música, el baile y la pintura como medio para prevenir la violencia. Nicole Enamorado, miembro activo de BATZAMU, dice, ha notado cambios en su comunidad a raíz de que los jóvenes se consolidaron como una red de comunicación social.

Nicole Enamorado es miembro activ y ocoordinadora de BATZAMU

“El PNUD vino a cambiar la estructura para que los jóvenes pudieran desarrollar sus habilidades. Nuestro municipio ha sido afectado por las malas noticias. El impacto de BATZAMU va más allá de las dinámicas. No todo es violencia, también hay arte, hay cultura, hay muchas cosas que destacar”-Nicole Enamorado, miembro activo de BATZAMU

BATZAMU se reune los jueves y viernes para ensayar su música, baile y pintura, y los sábados están dedicados a compartir información positiva a los niños y a la juventud a través de un programa en TVC Infantil.

Nicole practicando con el tambor

Carlos, quién lidera el programa COMVIDA, explica que, a pesar de que jóvenes han tenido que retirarse por estudio o trabajo, los miembros activos de COMVIDA siguen esforzándose por hacer crecer el interés de la comunidad, especialmente en nuevos jóvenes, por estas actividades que no solo contribuyen a una Choloma más segura y artística, sino que también impulsan el crecimiento personal y profesional de cada joven que se involucra con COMVIDA.

“A partir de este aprendizaje que hemos tenido con el acompañamiento y el apoyo del PNUD, hemos desarrollado un diplomado en formación artística y humana para la promoción de estilos de vida saludables.”

La labor del COMVIDA no se detiene, por eso Carlos Pineda, está en busca de redoblar esfuerzos para poder formar a las nuevas generaciones y superar los retos y dificultades de una sociedad impredecible.

En el 2011, Choloma registró 294 homicidios y para el 2017, logró reducir la tasa a 219 homicidios.

Estas acciones son parte del esfuerzo por una Honduras libre de violencia y a favor de una cultura de prevención, en el marco del ODS 16 Paz, Justicia e Instituciones Sólidas.

Durante la implementación de los Planes Locales de Convivencia y Seguridad Ciudadana en seis municipios de Honduras, el PNUD, con apoyo financiero de USAID, trabajó muy de cerca con los municipios y sus autoridades para asegurar respuestas efectivas a la violencia.